La Ley Orgánica General Penitenciaria establece que los establecimientos del área deben satisfacer las necesidades de la higiene y estar acondicionados de manera que el volumen de espacio, ventilación, agua, alumbrado y calefacción se ajusten a las necesidades de los internos.
Pese a este precepto penitenciario, los familiares de los internos se han quejado de la deficiente limpieza en los centros, que causan la proliferación de chinches de cama, garrapatas o cucarachas.
En este sentido, el portavoz del sindicato de prisiones ACAIP en la cárcel de Valdemoro, Jerónimo Martín, ha confirmado en declaraciones a Cadena SER Madrid Sur la existencia de las chinches, aunque ha indicado que es más numerosa si cabe la presencia de cucarachas.
A pesar de ello, ha indicado que no cree que la razón se encuentre exclusivamente en una falta de limpieza de las instalaciones, a la vez que ha recordado la existencia de otras plagas de chinches hace varios años.
Desde Instituciones Penitenciarias se ha asegurado que “hay inspecciones sanitarias” rutinarias en todas las prisiones de España.
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