Se trataba de una camada de cachorros de galgo. Los agentes recibían la llamada de unos vecinos que habían escuchado unos gemidos en el interior de un contenedor. Miembros del servicio de limpieza se desplazaron hasta allí y encontraron una camada de cinco perros, todos muertos menos uno. Los agentes trasladaron al Centro de Protección Animal de la ciudad al perro, aunque no pudieron salvarle la vida y murió al día siguiente, según ha informado el Jefe de Policía Local, José Francisco Cano.
La policía municipal está haciendo investigaciones para intentar localizar a la persona que abandonó a los cachorros para imputarle como supuesto autor de un delito de maltrato animal. Este delito tiene una pena de 3 meses a un año de cárcel.
Los agentes han felicitado a los vecinos por la colaboración y pide que se sigan denunciando conductas como éstas u otras relacionadas con el maltrato animal.
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