En el pasado Pleno Municipal, el grupo popular votó en contra de una moción en la que se solicitaba la inmediata apertura de la residencia Dolores Soria, que fue construida gracias a una inversión cercana a los 4,5 millones de euros, provenientes del Gobierno de España, y que lleva cinco meses equipada pero cerrada.
Según el grupo socialista, ya ha pasado tiempo suficiente como para que la alcaldesa, Miriam Rabaneda, se reúna con la Comunidad de Madrid y solicite la firma de un convenio para que sea la administración regional quien gestione el centro.
Sin embargo, según el portavoz socialista y ex alcalde Juan José Martín, a pesar de la enorme lista de espera los vecinos de Pinto tienen que esperar para acceder a las 60 plazas para residentes, tres de enfermería y 40 de estancias diurnas debido a la pasividad del nuevo gobierno municipal.
Según Martín, las intenciones ocultas de este retraso podrían estar vinculadas con el deseo de privatizar esta residencia municipal.
El ex alcalde ha señalado que ya en su periodo como regidor intentó que esta residencia alcanzara el convenio con la Comunidad y se pusiera en marcha, y que con el cambio de Gobierno esperaba que el Partido Popular se pusiera de acuerdo para abrir el centro.
Desde el gobierno local aseguran que existe un informe técnico que “desaconseja” la apertura del centro, al tiempo que afirman que carece del certificado del final de obras.
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