Los documentos, al parecer, consistían en las respuestas por escrito a las preguntas presentadas por IU en el pleno y le fueron remitidos a este grupo de forma anónima, cuyo portavoz, al percatarse del hecho procedió a devolver los papeles a la concejala.
El portavoz socialista Rafael Gómez Montoya ha manifestado que la concejala debería dimitir sólo por insultar a los trabajadores, llamándoles “delincuentes y ladrones”, para posteriormente presentar una denuncia en comisaría por el robo de los documentos.
Gómez Montoya ha mostrado la adhesión del PSOE al comunicado del Comité Unitario de Trabajadores denunciado estos hechos así como su apoyo a estos empleados municipales ya que ha afirmado que no merecen el trato vejatorio que se les ha dado.
Por su parte, el grupo municipal popular ha anunciado que ha puesto en manos de abogados el análisis de las denuncias del Comité Unitario de Trabajadores porque consideran que están llenos de falsedades y entiende que puede ser atentatorio contra la dignidad y lesionar el derecho al honor de la concejala.
El portavoz del PP, Juan Manuel Alamo, ha asegurado que no se obligó a nadie a realizar la prueba caligráfica.
Comentarios