El proyecto se basa en que durante ocho semanas un grupo de pacientes, seleccionado por las características de sus patologías, acude periódicamente al centro para mejorar su calidad de vida global y no centrar su tratamiento únicamente desde aspectos puramente médicos o especializados en cardiología.
Según María Molina, cardióloga del Hospital Severo Ochoa de Leganés, ha resaltado que se trata de abordar problemas de cardiopatías desde todos los puntos de vista posibles para evitar que se reproduzcan en el futuro o incluso que empeoren. Por eso además se hace hincapié en técnicas de relajación, íntimamente relacionadas con la salud de nuestro corazón.
Las sesiones de la Unidad de Rehabilitación Cardiaca además cuentan con sesiones de deporte en grupo, terapias con otros pacientes y consultas habituales para tratar otros problemas de salud que influyan en las cardiopatías.
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