Según el PSOE, en estos terrenos del parque de ocio se ha aumentado esa edificabilidad de 825.000 a 1.225.000 metros cuadrados, algo por lo que han pedido explicaciones porque consideran que es un “regalo de suelo” a las sociedades propietarias de los terrenos.
La alcaldesa Carmen Guijorro ha negado rotundamente cualquier cesión o regalo, y ha explicado que el Plan General sólo ha planificado de nuevo, desde el principio, el uso que se puede dar a esos terrenos, por lo que no hay ninguna ilegalidad y que desde luego viene avalado por todos los informes técnicos correspondientes.
Sin embargo el portavoz socialista, Sergio Neira, ha mantenido que esta recalificación del terreno es similar a la que se produjo hace años (en época de gobierno socialista) y que ha sido anulada por el Tribunal Supremo por “desviación de poder”. Por eso asegura que si la Comunidad de Madrid da el visto bueno al nuevo Plan, lo recurrirán ante los tribunales.
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