Este jueves, durante la concentración a las puertas del Ayuntamiento de Leganés por parte de los trabajadores, la tensión subió varios niveles hasta llegar al lanzamiento de huevos y el insulto a varios asesores y concejales del gobierno municipal. Una actitud que ha censurado el alcalde Jesús Gómez, que ha añadido que algunos concejales fueron “sitiados” y “zarandeados”, como la delegada de Personal Maria Paz Pérez Carrillo.
Según el alcalde, esta situación es “fruto del compadreo entre el Comité Unitario de Trabajadores y los gobiernos socialistas, que ha hecho concebir a CCOO y UGT la idea de que los que dirigen la delegación de Personal son ellos”.
Por su parte Comisiones Obreras de Madrid ha negado cualquier insulto, sitio o agresión por parte de los representantes sindicales a concejales o asesores municipales. En un comunicado, el sindicato asegura que durante la concentración se vivieron “momentos de tensión cuando asesores y concejales del PP pasaban por delante de los despedidos en una clara actitud de provocación”. Sin embargo el sindicato ha asegurado que la tensión “queda muy lejos” de las acusaciones del alcalde.
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