José María Díaz- Maroto alterna su trabajo como fotógrafo con su labor como comisario de exposiciones, por lo que su experiencia en el mundo del arte es más que notoria. Desde 1981 sus obras se han podido ver en ciudades como Atenas, Milán, Nueva York o Pekín, además de recorrer las principales urbes españolas.
Su última muestra apuesta por el color y la crudeza a partes iguales. De hecho las dos caras, el bien y el mal, son un binomio constante en esta exposición. Reflejo de su evolución se observa también más importancia para el “retrato ambientado”.
Hasta el próximo 15 de enero la sala B del Centro de Artes Tomás y Valiente de Fuenlabrada acoge este “Bloc de notas” de José María Díaz- Maroto.
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