Según el contrato firmado entre la alcaldesa Miriam Rabaneda y los responsables de la fundación sin ánimo de lucro Inclusive, la cesión es por un plazo de diez años, prorrogables hasta un máximo de 25. Por su parte, la fundación asume todos los gastos derivados de su puesta en marcha.
En el Pleno Municipal del pasado mes de agosto la propia alcaldesa Miriam Rabaneda ya manifestaba que la cesión de este centro es muy importante toda vez que propiciará la puesta en marcha de las instalaciones, cuyas obras se intentarán agilizar para que se pueda abrir este mismo año.
Desde el consistorio recuerdan que se han reunido con familias de personas con parálisis cerebral o daño cerebral adquirido para informarles de los trámites realizados, apoyando todas ellas la decisión del gobierno local.
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