El Plan, que ha sido aprobado con los votos de PSOE e IU, plantea una reducción en la partida presupuestaria de personal de hasta un millón de euros, ya que aunque no se contemplan despidos de trabajadores sí que se recoge una congelación de los puestos de trabajo, un “control del gasto de personal” y una ausencia de reposición en los casos de bajas por jubilación.
Además dicho Plan de Saneamiento contempla “conversaciones” con el Ministerio de Hacienda para reducir del 50 al 25 por ciento las retenciones para pago a proveedores, refinanciar créditos a 20 años, un ahorro de casi dos millones de euros con la “reformulación” de los contratos de servicios y cambios organizativos como las eliminación de duplicidades que podrían generar un ahorro para las arcas municipales de medio millón de euros.
Al respecto el concejal de Hacienda de Parla, Fernando Jiménez, ha manifestado durante el debate plenario que se trata de un Plan “para preparar las cuentas a los tiempos actuales, teniendo como prioridad la prestación de unos servicios públicos municipales de calidad, dignos para los ciudadanos”.
Por su parte el portavoz del Partido Popular local, Miguel Ángel López, ha calificado de “golfada” este plan, que a su juicio sólo sirve “para ir tirando hasta las próximas elecciones”. Los “populares” también han asegurado que “sólo el 6 por ciento de los Ayuntamientos de toda España, los más arruinados”, se han acogido a estas condiciones del Ministerio de Hacienda, a cambio además de “crear nuevos impuestos”.
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