La polémica saltó en el mes de abril y parece que no nos va a abandonar hasta dentro de mucho tiempo. La construcción de un colegio católico concertado en Parla vuelve a enfrentar a las administraciones regional y local. Esta semana la tensión ha seguido creciendo: el martes la consejera Figar pedía al Ayuntamiento que entregase ya la licencia de obra, porque de lo contrario podría estar prevaricando, pero el jueves la primera teniente de alcalde, María José López Bandera, anunciaba que no hay petición de licencia, sino un “acto comunicado” que no es válido en estos casos. Ahora la Comunidad se mantiene en su versión.
Este viernes fuentes de la Consejería de Educación han señalado que la petición de licencia de obras se realizó el 23 de mayo, por lo que han pedido a los técnicos del consistorio que "no planteen estrategias dilatorias" porque "ponen en peligro el derecho a la educación de un centenar de niños". Además, estas fuentes oficiales creen que el gobierno local "está prevaricando" y que adoptarán "las medidas oportunas" desde el Gobierno regional.
Por último desde el gabinete de Lucía Figar recuerdan que el alcalde de Parla, Jose María Fraile, adjudicó la licencia del anterior colegio concertado en suelo municipal en sólo cuatro días, por lo que piden que también acelere en este caso.
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