El Pleno Municipal de Valdemoro ha decretado este lunes como día de luto oficial tras conocer el trágico accidente en el que cinco vecinos, todos miembros de una misma familia, fallecían este domingo en El Pedernoso (Cuenca).
La declaración se ha producido a propuesta del alcalde, José Carlos Boza, y además todos los concejales miembros del Pleno han guardado un minuto de silencio en señal de luto por esta familia, que residía en Valdemoro desde el año 2004.
El portavoz del equipo de Gobierno, Javier Hernández, ha señalado que el de hoy es un “día triste”, por lo que “como no puede ser de otra forma el Pleno ha guardado un minuto de silencio y se ha decretado día de luto oficial en todo el municipio”, en el transcurso del cual todas las banderas oficiales han ondeado a media asta.
El Ayuntamiento de El Pedernoso, que este lunes ha celebrado un pleno urgente para trasladar su pésame, va a convocar dos días de luto oficial y pedir al Ministerio de Fomento mejoras en un punto que ya acumula numerosos accidentes de tráfico, como ha destacado su alcaldesa Mari Ángeles Baleriola.
El accidente se produjo en la Nacional 301, en el término municipal de El Pedernoso, en Cuenca, cuando por causas desconocidas el coche en el que iban la pareja, de 28 y 26 años y de origen dominicano, sus dos hijos y un pariente también menor de edad, invadió el carril contrario y chocó de forma violenta con un camión articulado que circulaba por él.
Eran las seis y cuarto de la tarde, cuando el BMW en el que viajaba la familia, en el kilómetro 150 de la N 301 a la altura de El Pedernoso, Cuenca, derrapó en una curva e invadió el carril contrario por el que circulaba un camión articulado, con el que colisionó lateralmente. El choque fue tan grande que el turismo se partió en dos causando la muerte en el acto de todos los ocupantes.
Aunque hasta el momento se desconocen las causas del accidente, se apunta a la posibilidad de que el coche derrapara a causa del pavimento mojado por la lluvia. Muchos vecinos de la zona se han quejado de este “punto negro”. El conductor del camión, de 44 años, un madrileño residente en Seseña, Toledo, resulto ileso, aunque tuvo que ser atendido por psicólogos al sufrir un fuerte shock nervioso.
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