La operación comenzó en la provincia de Ciudad Real con agentes de Valdepeñas después de que un particular denunciase que había visto el vehículo que previamente había vendido anunciado en Internet por un precio muy superior y un kilometraje menor.
A partir de ahí los agentes empezaron a investigar comprobando que el coche se encontraba en un concesionario de Parla, vinculado con otro en Villaverde. Finalmente el 15 de octubre se procedió al registro de ambos locales y se detuvo a siete personas.
Entre los detenidos hay dos vecinos de Ciempozuelos y otro de Parla. Intervinieron 26 vehículos y casi 300 documentaciones de otros coches, además de ordenadores para manipular cuentakilómetros y casi 2.500 euros en metálico. Se les acusa de casi 90 delitos.
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