Los encargados de realizar esta campaña de vigilancia son los responsables del Servicio de Inspección de Consumo, que visitarán tanto centros comerciales como medianos y pequeños establecimientos. La concejalía de consumo fuenlabreña recuerda que los artículos rebajados deben haber estado al menos un mes en el stock habitual, y no haber entrado en promociones tampoco en ese período. La duración de las rebajas no puede ser inferior a una semana ni superior a dos meses.
Los técnicos de consumo se fijarán especialmente en los carteles anunciadores del período de rebajas, el doble etiquetado, las hojas de reclamaciones y comprobarán que al menos el 50% de los artículos de la tienda tengan descuentos. Las formas de pago admitidas y las devoluciones deben ser las mismas que el resto del año, a no ser que el vendedor especifique lo contrario en un cartel visible. Asimismo la garantía no sufre modificaciones al ser período de rebajas. A la hora de salir a comprar, los propios consumidores también deben estar atentos a todos estos aspectos.
El Consistorio fuenlabreño recuerda también la importancia del consumo responsable para no realizar compras sin control ni necesidad. Por último los compradores tienen siempre a su disposición la Oficina Municipal de Información al Consumidor en el Ayuntamiento, de lunes a jueves, de 9 de la mañana a una del mediodía.
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