Beatriz Arceredillo apuesta por una ciudad con futuro y por aprovechar la riqueza intercultural de Parla
La recién elegida alcaldesa de Parla, tras la dimisión de José María Fraile, por su presunta implicación en la Operación Púnica, es prudente a la hora de hablar de todo lo que hay que hacer en el municipio. Sí agradece todos los apoyos que ha tenido de vecinos, compañeros y trabajadores del Consistorio para sacar a la entidad de la parálisis momentánea que dejó la actuación judicial, sin mencionar otras zancadillas, que también ha vivido en carne propia.
Dice tener entre sus prioridades garantizar los servicios básicos, en especial todo lo relacionado con lo social y la atención a los más desfavorecidos. Reconoce que esto supone suprimir gastos para ajustarse a una economía municipal dañada, sin que se deje de pagar nóminas o prestar servicios fundamentales para el día a día. Arceredillo hace balance del año que ha terminado con el broche negro de la Púnica y cree que ésta operación no será una losa para los socialistas de la ciudad.
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