Es un documento donde reflejamos nuestros datos de contacto, nuestra formación tanto académica como complementaría y nuestra experiencia profesional. “En segundo lugar”, matiza Pilar Juárez, técnico de empleo del ayuntamiento de Parla, “aclaremos para que sirve, cual es su objetivo. No es proporcionarnos un empleo, ninguna empresa nos va a contratar sólo leyéndolo. El objetivo es interesar a la empresa lo suficiente como para que quiera conocernos personalmente”.
Hay varios modelos de CV y aunque mas o menos todos tienen los mismos apartados pero se diferencian en la estructura; “es decir en la manera de presentar la información. Es importante que elijamos el modelo más apropiado para nuestro perfil y con el que nos sintamos más a gusto, que personalicemos nuestro currículo”.
Juarez explica que “cada uno de nosotros somos únicos, nuestra formación, nuestra experiencia y sobre todo nuestras competencias personales son sólo nuestras, nadie mas las tiene iguales y esa diferencia es la que puede inclinar a la empresa por un candidato u otro”. Es conveniente analizar primero la oferta, en el caso de que sea específica, qué requisitos solicita, “valorar en qué medida respondemos a ellos y si podemos competir por el puesto, elaboremos el CV en función de esa oferta”. Se recomienda hacer un ejercicio de ponerse “en el lugar del otro”, en el lugar de la empresa que lo va a recibir, que información nos resultaría interesante, que este bien ordenada y resulte fácil de leer.
Si se opta por la “autocandidatura”, es decir cuando no nos consta que esa empresa tenga oferta en este momento pero nos presentamos como candidato para cubrir posibles necesidades, “busquemos información sobre esa empresa: que perfiles le interesan y cuales son sus valores, a que le da importancia: a la formación, al trabajo en equipo, a la superación personal…”.
Es aconsejable tener un “CV guía” donde vamos escribiendo todo lo que hacemos, los cursos con el número de horas e incluso los contenidos principales, cada puesto con todas las funciones o tareas que realizábamos y las competencias personales que vamos desarrollando. “El objetivo de este currículo no es ser enviado a ninguna parte sino servirnos para seleccionar que ponemos y de que manera presentamos la información según la oferta o la empresa a donde queremos enviarlo” apunta la técnico de empleo.
Los profesionales de sectores artísticos o creativos se pueden permitir ciertas licencias sobre el color del papel, insertar dibujos o utilizar modelos de letras especiales, “los demás mejor discretos, pero discreto no es aburrido” concluye.
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